Unos premios que entregaron siete soles, y una serie de distinciones a aquellas obras destacadas en la protección del patrimonio histórico, así como las personas y entidades que han colaborado de alguna manera en la protección del patrimonio ecijano, el tangible y el intangible.

En la sección de arquitectura y tras un análisis riguroso de las obras realizadas dentro del ejercicio, si bien se han concedido premios a los siete soles que habitualmente tiene establecidos la Asociación, se hace preciso puntualizar que debido a la crisis de la construcción el número de expedientes en competencia no ha sido lo elevado que sería de esperar. Esto, tal como ocurrió en las últimas ediciones, se debe a que la mencionada crisis desafortunadamente aun deja sentir sus efectos.

Se han concedido tres soles a obras de nueva planta de viviendas unifamiliares en las calles Merced, Santa Ángela y Cavilla, por la integración formal de las mismas al lenguaje urbano del parcelario en que se encuentran ubicadas.

El cuarto sol se concedió al apartado de obra contemporánea por valorar la transformación de una obra existente de más de tres décadas de antigüedad, utilizando técnicas actuales para convertirla en una obra actualizada y moderna en urbanización ASTIGI.

El quinto sol va dirigido a los trabajos de restauración de fachada y adecentamiento de sus paramentos del Palacio renacentista de los Condes de Valhermoso de Cárdenas y Torres Cabrera.

El sexto sol se concedió a la necesaria —y solicitada por la ciudadanía— intervención de consolidación y puesta al día de una de las más singulares piezas de nuestra retablística callejera. Se trata de la actuación realizada sobre el retablo de la Virgen de Belén.

Para terminar, el séptimo sol recayó sobre la recuperación integral, con la consiguiente extracción y restauración en Sevilla por el Instituto Andaluz de Patrimonio y reubicación en su lugar, del magnífico mosaico romano de Los Amores de Zeus, aparecido en el Picadero, en el recinto de la primitiva Plaza de Armas del Alcázar.

Las menciones de los premios Amigos de Écija de Protección al patrimonio histórico en este 2020 han sido numerosas y muy merecidas.  La primera de ellas se otorgó a RAMÓN SOTO GONZÁLEZ DE AGUILAR, Componente Histórico de la Junta Directiva de Amigos de Écija y Emblemático Reportero Gráfico de Nuestra Ciudad.

Se otorgó distinción también a ANTONIO MARTÍN PRADAS e INMACULADA CARRASCO GÓMEZ, Directores de las Jornadas de Protección del Patrimonio Histórico Artístico de Écija. Desde el año 2003, en que se celebró la segunda edición de las mismas, Antonio Martín Pradas las ha encabezado como Director. En la mayoría de las ediciones, Antonio ha contado con la inestimable colaboración de su compañera investigadora —y, al igual que él, ecijana— Inmaculada Carrasco Gómez.

Se distinguió también a MARÍA ANDÚJAR GARZÓN, por una vida dedicada al fomento de la lectura y del crecimiento cultural de Écija a través de su excelente gestión y dirección de la Biblioteca Municipal de Écija. Maruja ya estaba en la Biblioteca cuando esta solo era un ilusionante proyecto que empezaba a germinar gracias a su ilusión y entrega. Este año se ha jubilado.

En la modalidad de MANTENIMIENTO Y RECUPERACIÓN DEL PATRIMONIO ECIJANO, se premió al «FOGÓN XI TORRES», de los HERMANOS FRANCISCO Y MANUEL PRIEGO LÓPEZ. En este caso, por la recuperación y exposición pública de numerosas piezas de carácter etnológico que, durante siglos, han sido fundamentales en el devenir de nuestra intrahistoria.

Se distinguió también al CEIP ASTIGI con motivo del 50 aniversario de su apertura.

En la modalidad PUBLICACIONES, se premió al libro ÉCIJA ARTÍSTICA, COLECCIÓN DOCUMENTAL. SIGLOS XVI Y XVII, de los autores Gerardo García León y Marina Martín Ojeda, editado por la Universidad de Sevilla. La realización de este trabajo ha supuesto el análisis de más de 40.000 documentos que han proporcionado una información, en la mayoría de los casos, completamente desconocida.

En la modalidad MEDIOS AUDIOVISUALES Y DE COMUNICACIÓN AL SERVICIO DE LA CIUDAD se distinguió a Ahora Magazine, revista que  vio por primera vez la luz hace dos años, concretamente en la Navidad de 2017. Nació con la intención de rescatar un medio de comunicación en declive, el papel, y con un claro objetivo: contar historias, descubrir nuevos talentos y conocer más profundamente a los que llevan muchos años entre nosotros.

En la MODALIDAD de RESTAURACIÓN DE ARTE SACRO, destaca la recuperación de la IMAGEN DE MARÍA SANTÍSIMA DEL MAYOR DOLOR Y TRASPASO, a cargo de Sergio Martín Gutiérrez y cuya promotora ha sido la Rectoría de la Iglesia de San Francisco.

En la modalidad de BELLAS ARTES, recogió su premio AGUSTÍN MARTÍN DE SOTO, autor de numerosos trabajos de restauración y creación artística. Un joven valor que aún tiene mucho que decir en el mundo de las artes.

Finalmente, el ARTESANO DEL Año fue MIGUEL ÁNGEL BALMASEDA ROSA, que el pasado año, Miguel Ángel Balmaseda ha sido galardonado con un premio extraordinario, de dimensión nacional, a las Artes de la Construcción: El Richard H. Driehaus, recibido en el Ministerio de Fomento en Madrid.