Peatonalizada la calle Santa Cruz tras su arreglo para dejarla en plataforma única

Una vez finalizadas las obras para llevar a plataforma única la calle Santa Cruz en el tramo desde el cruce con calle Garcilaso y hasta la Plaza Nuestra Señora del Valle, se ha iniciado la peatonalización de la calle, teniendo en cuenta el entorno.

La peatonalización de esta y otras calles del centro histórico de Écija está contemplada en el avance del Plan Especial de Protección, Reforma Interior y Conservación del Centro Histórico de Écija (Pepriccha), aprobado por la corporación municipal en 2014, en el que se establece una serie de medidas para la progresiva peatonalización del centro de la ciudad, como ha recordado el concejal de Gestión del Espacio Urbano, Sergio Gómez.

Estas medidas intentan “poner en valor nuestro centro histórico”, señala Gómez, “al hilo de la deriva que están tomando todos los centros históricos de ciudades medias, como Antequera, Ronda o Puente Genil”, cita el edil, que añade que al peatonalización “va acompañada de actuaciones en cuanto a tráfico y a movilidad sostenible”.

El concejal de Gestión del Espacio Urbano entiende que la peatonalización genera tensiones “como cualquier cambio, pero está claro que tenemos que mirar desde una amplitud un poquito más colectiva, en contraposición con la aceptación o no que nos pueda causar a nivel personal”.

La tendencia de peatonalización “trata de volcar el tráfico para ir a determinadas zonas en lo que se llamaba ‘supermanzanas’ en el Pepriccha” y de “preservar el casco histórico del tráfico rodado, teniendo en cuenta que tenemos un casco histórico que no está pensado para la carga de tráfico que tiene nuestra ciudad y, en general, todas las ciudades”.

“La desincentivación progresiva que pretende este tipo de intervenciones de sacar el tráfico del centro no es más que el objetivo de que alguien que viene de La Alcarrachela, de El Puente, de la calle Nueva o de Puerta Cerrada no tenga que venir por el casco histórico para ir a Puerta Palma, al Polideportivo del Valle, a Colón o al cementerio”, explica Sergio Gómez. “En definitiva, evitar que la Plaza del Salón sea lugar de paso para ir de un lado a otro de la ciudad”.

“Para eso se crean esas ‘supermanzanas’, zonas que pueden absorber esa carga de tráfico sin que la misma se padezca en el centro”, añade el edil, que reconoce que “habrá problemas que resolver, como la carga y descarga, el suministro a la plaza de abastos” o la cuestión de los residentes, “a los que hay que ofrecerles la oportunidad de que puedan ir en condiciones de seguridad a sus viviendas”, además del acceso de los servicios de limpieza.

Por último, el concejal de Gestión del Espacio Urbano subraya que la progresiva peatonalización del centro histórico supone un atractivo comercial. “La gente no compra desde el coche, la gente compra cuando va andando”, señala, “y cuando la gente va a comprar al centro está buscando algo más”.

Con la peatonalización de la calle Santa Cruz, el tráfico rodado se desvía hacia la calle Espíritu Santo, por la que se puede acceder a la Plaza de Nuestra Señora del Valle por la calle Sancha Carrillo.

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